Skip to content

¿QUÉ SON LOS DERECHOS SEXUALES Y REPRODUCTIVOS?

Según la definición general del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de la Naciones Unidas, los derechos sexuales y reproductivos son un “conjunto de derechos y libertades, entre las que están, además del acceso a bienes y servicios relativos al disfrute del derecho a la salud, las decisiones libres y responsables con respecto a los asuntos relacionados con el propio cuerpo y la propia salud sexual y reproductiva”.

Según la definición general del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales de la Naciones Unidas, los derechos sexuales y reproductivos son un “conjunto de derechos y libertades, entre las que están, además del acceso a bienes y servicios relativos al disfrute del derecho a la salud, las decisiones libres y responsables con respecto a los asuntos relacionados con el propio cuerpo y la propia salud sexual y reproductiva”.

LOS DERECHOS SEXUALES Y REPRODUCTIVOS SON DERECHOS FUNDAMENTALES

Eso quiere decir que el Estado debe garantizarlos a todas las personas del país. El sistema de salud (hospitales, clínicas, centros de salud) por los y las profesionales de la salud deben cumplir con todas las normas que protejan estos derechos y deben asegurarse de brindar un servicio de salud que respete la dignidad y la autonomía de las personas.

LOS DERECHOS SEXUALES Y LOS DERECHOS REPRODUCTIVOS NO SON LO MISMO

Es necesario diferenciar los derechos sexuales de los reproductivos, pues sexualidad y reproducción son dos ámbitos diferentes en la vida del ser humano. La primera no debe ser entendida solamente como un medio para lograr la segunda y hay que desligar los derechos sexuales de la maternidad. Sin embargo, no se puede negar que los derechos sexuales y reproductivos están indudablemente relacionados pues la autonomía en las decisiones reproductivas contribuye a llevar una vida sexual sin riesgos de embarazos no deseados, lo que quiere decir que cada una de estas categorías posee una definición y un contenido propio, pero parten de una base común.*

* Sentencia T-732 de 2009

SALUD SEXUAL

“La salud sexual es un estado de bienestar físico, mental y social en relación con la sexualidad. Requiere un enfoque positivo y respetuoso de la sexualidad y de las relaciones sexuales, así como la posibilidad de tener experiencias sexuales placenteras y seguras, libres de toda coacción, discriminación y violencia”

 

(ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE LA SALUD).

SALUD REPRODUCTIVA

“La salud reproductiva aborda los mecanismos de la procreación y el funcionamiento del aparato reproductor en todas las etapas de la vida. Implica la posibilidad de tener una sexualidad responsable, satisfactoria y segura, así como la libertad de tener hijos si así se desea y cuando se desee. Esta concepción de la salud reproductiva supone que las mujeres y los hombres puedan elegir métodos de control de la fertilidad seguros, eficaces, asequibles y aceptables, que las parejas puedan tener acceso a servicios de salud apropiados que permitan a las mujeres tener un seguimiento durante su embarazo y que ofrezcan a las parejas la oportunidad de tener un hijo sano”

 

 (ORGANIZACIÓN MUNDIAL DE LA SALUD).

Pero
¿qué significa
todo eso?
¿Cómo lo vivo
en mi cotidianidad?

Los derechos sexuales y reproductivos (DSDR) se pueden manifestar de muchas formas.

Los DSDR protegen mi derecho a decidir si quiero o no tener hijos y cuántos hijos quiero tener, siempre respetando mis motivos y teniendo como centro mi consentimiento. Por eso, gracias a la garantía de los DSDR puedo interrumpir un embarazo no deseado, realizarme la ligadura de trompas cuando yo quiera, sin importar mi edad o número de hijos, o decidir tener el número de hijos que yo considere pertinente según mi proyecto de vida.

Los DSDR me permiten decidir si quiero prevenir un embarazo mediante métodos anticonceptivos y garantizan que pueda acceder a ellos a través del sistema de salud. También protegen mi decisión de decidir qué método se ajusta más a mi cuerpo y a mis necesidades.

Los DSDR protegen mi acceso a los exámenes médicos, tales como la citología, el examen de cáncer de útero o exámenes relacionados con enfermedades de transmisión sexual. La protección de estos derechos implica que el sistema de salud debe realizarme cualquiera de estos exámenes o pruebas en condiciones de dignidad e intimidad.

Los DSDR me protegen contra cualquier tipo de violencia que sufra en el trabajo de parto o en los controles prenatales y posnatales de mi embarazo. Esas violencias pueden ser un desgarramiento debido a malas prácticas del médico, falta de intimidad en los procesos, falta de cuidado con el bebé o conmigo, o tratos irrespetuosos o poco dignos

Publicaciones

Después de más de una década, desde la aprobación de la sentencia C-355 de 2006 que despenaliza el aborto en tres circunstancias, el panorama no ha cambiado significativamente. A pesar de que la sentencia genera condiciones para que las mujeres que se encuentran en alguna de las situaciones enumeradas por las causales de la Corte puedan interrumpir su embarazo de manera segura y legal, aún persisten numerosos obstáculos institucionales y sociales para que las mujeres puedan acceder efectivamente a su derecho. Los prejuicios de los funcionarios de salud, las trabas institucionales que les imponen a las mujeres para acceder a la interrupción del embarazo, las restricciones dadas por contextos en los que persiste la violencia o que están dominados por actores armados, la estigmatización y la falta de acceso a la información sobre posibilidades para acceder al aborto, son algunos de los múltiples obstáculos que cotidianamente enfrentan las mujeres, mayoritariamente rurales y pobres, que buscan el ejercicio de su derecho a interrumpir el embarazo.

Por esa razón, desde Dejusticia nos hemos centrado en mostrar este problema y, además, por medio de diversas investigaciones, hemos tratado de contribuir al objetivo de superar los obstáculos para la implementación de la C-355 de 2006:

Radio y podcast

Estos cuatro programas de radio fueron producidos por cinco emisoras comunitarias de Bogotá, Soacha y los municipios de San Onofre, Ovejas y Carmen de Bolívar durante los talleres 'El cuerpo habla: Radio comunitaria en sintonía con los derechos sexuales y reproductivos'. El podcast 'Entre la bata y la toga' es producto de la investigación que lleva el mismo nombre y fue producido en alianza con Akorde podcast.

Intervenciones

icon-judge
Powered by swapps
Scroll To Top