|
Presidente Uribe debe respetar independencia del poder judicial
Por: Dejusticia | Octubre 9, 2007
(New York, 9 de Octubre de 2007) ? La interferencia del Presidente de
Colombia Álvaro Uribe con las investigaciones adelantadas por la Corte
Suprema de Justicia de Colombia y sus reiterados ataques contra tal
institución constituyen una amenaza a la independencia del poder judicial,
dijo hoy Human Rights Watch.
El día de ayer, el Presidente Uribe divulgó un comunicado de prensa
solicitando se investigue una denuncia según la cual el magistrado de la
Corte Suprema Dr. Iván Velásquez habría intentado persuadir a un detenido
para que brindara testimonio implicando al presidente en un asesinato. Uribe
declaró que habría recibido una carta de dicho sujeto, denunciando las
supuestas presiones del magistrado.
Uribe también ha reconocido que llamó por teléfono al Dr. Velásquez, para
preguntarle sobre este asunto. El magistrado Velásquez es el jefe del equipo
de la Corte Suprema encargado de investigar las relaciones entre políticos y
grupos paramilitares en los escándalos popularmente conocidos como de la
?parapolitica.?
?La Corte Suprema, a pesar de enormes obstáculos, ha logrado progresos sin
precedentes en la investigación de los vínculos entre paramilitares y
políticos cercanos al presidente,? dijo José Miguel Vivanco, Director para
las Américas de Human Rights Watch. ?La llamada telefónica del Presidente
Uribe al magistrado encargado de conducir investigaciones sumamente
delicadas constituye una presión política que podría intimidar a la Corte y
afectar el resultado de estos procesos.?
La Corte Suprema ha iniciado investigaciones contra docenas de congresistas
pertenecientes a la coalición de Uribe, incluyendo al primo del Presidente
Uribe, el senador Mario Uribe, por supuesta colaboración con paramilitares,
quienes además de estar vinculados al narcotráfico son responsables de
innumerables atrocidades. Como consecuencia de estas investigaciones,
catorce congresistas se encuentran actualmente detenidos.
Las declaraciones del Presidente Uribe se producen poco tiempo después de la
publicación de un informe de la prestigiosa revista semanal colombiana
Semana, acerca de las investigaciones realizadas por la Corte Suprema sobre
llamadas telefónicas de algunos congresistas detenidos, en las cuales
parecerían estar tramando sobornos a testigos y funcionarios públicos y la
destrucción de evidencias en su contra.
La Corte Suprema ha defendido al Juez Velásquez, y ha solicitado que se
inicie una investigación sobre una posible obstrucción de justicia por parte
del presidente. El Juez Velásquez, quien ha trabajado por dos décadas en la
rama judicial, ha negado enérgicamente cualquier esfuerzo por involucrar a
Uribe en las investigaciones, señalando que, en cualquier caso, es el
Congreso, y no la Corte Suprema, la institución encargada de investigar al
presidente.
La versión de los hechos dada por el Juez Velásquez habría sido corroborada
por una fiscal que fue testigo de la entrevista de Velásquez con el detenido
en el transcurso de sus investigaciones. La fiscal habría dicho que el
Presidente Uribe nunca fue mencionado durante dicha diligencia.
Human Rights Watch subrayó que Uribe reiteradamente ha formulado
declaraciones agresivas contra la Corte y los medios de comunicación que
están investigando a su administración y a sus aliados políticos.
A comienzos de este año, cuando la Corte Suprema dictaminó que la
Constitución prohibía el indulto por la conformación de grupos
paramilitares, Uribe se enfrentó a la Corte, acusándola de tener un ?sesgo
ideológico.? Anteriormente, había arremetido contra destacados medios de
comunicación colombianos, cuando revelaron acusaciones según las cuales el
ex jefe de inteligencia de Uribe, Jorge Noguera, habría colaborado con los
paramilitares.
La semana pasada, Uribe acusó al periodista Gonzalo Guillén de El Nuevo
Herald de hacerle falsos señalamientos en un libro publicado por Virginia
Vallejo, la ex amante del conocido jefe del cartel de drogas de Medellín,
Pablo Escobar. Vallejo asegura en el libro que Escobar le presentó
personalmente a Uribe. Guillén, quien ha escrito sobre vinculaciones entre
la administración de Uribe y los paramilitares, y que previamente ya había
denunciado serias amenazas contra su vida, ha declarado que él no ha tenido
nada que ver con el libro de Vallejo ni con las acusaciones contenidas en
él. Después de las criticas de Uribe, Guillen anunció que había recibido
nuevas amenazas de muerte y que tendría que salir del pais.
?En un país como Colombia, donde periodistas y jueces muchas veces han sido
asesinados por sus investigaciones, el Presidente debe ejercer el mayor
cuidado para evitar incluso la apariencia de estar intimidándolos, o estar
poniéndolos en peligro,? dijo Vivanco.
Para obtener más información sobre el trabajo de Human Rights Watch en
Colombia, puede visitar:
http://www.hrw.org/doc/?t=spanish&c=colomb
Para más información, por favor póngase en contacto con:
En Nueva York, Maria McFarland: +1-508-757-0357
En Washington, DC, José Miguel Vivanco: +1-202-612-4330; +1-917-519-8363