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El taller de Visión Afro en Cali fue fundamental para discutir sobre los problemas y las necesidades que enfrentan las diferentes comunidades afro, y específicamente las mujeres, pero también para poner sobre la mesa posibles soluciones a esos fenómenos. | Diego Zambrano Benavides

Un oasis para dialogar y escribir sobre afrofeminismos

Cerca de 30 mujeres, integrantes del proyecto Visión Afro 2025, se reunieron para participar de un taller que ahondó sobre afrofeminismos, interseccionalidades, desigualdades y racismo estructural.

Por: Noviembre 27, 2023

Experiencias íntimas y procesos comunitarios en sus territorios, cuestionamientos por políticas estatales y preguntas sobre la identidad y la existencia; así de extensa fue la gama del diálogo que reunió en Cali, durante dos días, a un grupo de mujeres afrodescendientes de Colombia, Brasil y Perú, en un taller del proyecto Visión Afro 2025, liderado por Dejusticia,  el Centro de Estudios Afrodiaspóricos (CEAF) y el Instituto de Investigaciones Afrolatinoamericanas de la Universidad de Harvard (ALARI), con el apoyo de la Fundación Ford.

El taller fue también un auténtico oasis de escritura. Las participantes pudieron afinar los lápices y avanzar en la redacción de cada uno de sus aportes a un libro que se publicará el próximo año. Un libro sobre afro-feminismos e interseccionalidades en Colombia y América Latina, teniendo en cuenta los tres pilares del Decenio Internacional de los Afrodescendientes: reconocimiento, justicia y desarrollo.

En Cali, este espacio fue fundamental para discutir sobre los problemas y las necesidades que enfrentan las diferentes comunidades afro, y específicamente las mujeres, pero también para poner sobre la mesa posibles soluciones a esos fenómenos. Así lo expuso Diana Guzmán, directora de Dejusticia, quien en la apertura de este taller enfatizó en que precisamente en proponer soluciones está el poder del afro-feminismo. “Tiene la capacidad de interpelar los supuestos de los que venimos y de generar apuestas creativas y desestabilizadoras que nos proponen nuevas y mejores firmas de vivir en el mundo”, señaló.

El Decenio, subrayó Melissa Gómez, directora del CEAF, es solo un punto de partida. Desde allí es que se pueden observar o exigir acciones estatales y políticas públicas “para superar las desigualdades históricas que afectan a la diáspora africana en el mundo, particularmente en Colombia y América Latina”. Para ella, son las mujeres, como las participantes del taller, quienes desde los liderazgos afrofeministas deben apostar por incidir. Además, expresó que contar y compartir realidades es una forma en la que se puede contribuir a erradicar las violencias de género que afectan, todos los días, a las mujeres y personas afrodiversas.


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Reflexiones y aprendizajes: escribir para fomentar cambios

Juliane Oliveira, invitada de Brasil y estudiante de doctorado en Antropología Social en la Universidad Federal de Río de Janeiro, habló de cómo las mujeres en su país hacen que la interseccionalidad no sea una categoría analítica sino una práctica del día a día. Convierten este concepto en riqueza para potenciar sus afectos y relaciones, y así construyen redes comunitarias que conectan con los cimarrones en sus más de 6.000 comunidades, también conocidas como quilombos.

El racismo estructural afecta la vida digna y el acceso al territorio. Así lo cree María del Pilar Cáceres , invitada de Perú y estudiante de Ph. D. en estudios del África y la Diáspora Africana en la Universidad de Texas (EE. UU.). “Nos siguen deshumanizando a los afroperuanos, y se habla históricamente de nosotros como una población esclavizada, pasiva, relegada a oficios de cocina o al deporte. Debemos construir narrativas distintas y reconocer, por ejemplo, el arte como un escape para contar nuestras experiencias y que nuestra existencia no se reduzca a una lucha constante, sino a una vida de esperanza, de libertad y sin discriminación”, expresó. 

Para el caso colombiano, la reflexión la dejó Laura Romero López, docente de la Universidad San Buenaventura en Cartagena. Dijo que el reto de Colombia es dejar que las mujeres negras dejen de estar en un lugar de no existencia. “Sin voluntad política los saberes técnicos de la interseccionalidad, que son el mayor aporte de los feminismos negros,  no van a funcionar”, advirtió.  

Otras ideas y reflexiones que quedaron de estos dos días de diálogo fueron sobre: la necesidad de escribir e insistir en las agendas de derechos humanos de las mujeres negras; la escritura como un legado y, a la vez, un regalo; las universidades como lugares que, pese a ser recintos de debate y conocimiento, tampoco escapan de lógicas racistas; las comunidades que a veces son instrumentalizadas en las investigaciones y la importancia de que lo que se escribe sobre ellas cambie su realidad.


 

El proceso de Visión Afro 2025

Desde Visión Afro 2025, además de los artículos que serán compilados en un libro y que recogerán los aprendizajes del taller en Cali, también se ha promovido la construcción y la visibilización de narrativas afro-feministas a través de blogs de opinión. Es así como escritoras afrocolombianas han evidenciado, a través de textos publicados en la página de Visión Afro, los aportes, las dudas y los retos de las mujeres afrodescendientes en la construcción del tejido social en sus territorios, a nivel regional y nacional.

Por otro lado, en el marco de Visión Afro, el próximo 11 de diciembre se lanzará un libro elaborado por Dejusticia, sobre el papel de la justicia ancestral como alternativa a la justicia ordinaria durante la pandemia, con el foco en los consejos comunitarios del norte del Cauca y las necesidades de hallar mecanismos judiciales con enfoque interseccional y de género. 

Los avances y los desafíos en materia de desarrollo y las agendas de incidencia de las mujeres afrodescendientes de América Latina, teniendo como referente el Decenio, han sido los enfoques para impulsar espacios presenciales y virtuales para reflexionar sobre las desigualdades estructurales que se han posicionado entre las comunidades negras en territorios vulnerables, históricamente desprotegidos y con muchas necesidades sociales por resolver.


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